Puede bailar en la calle mientras se dirige al trabajo, mirar a los ojos de un desconocido y hablar de amor a primera vista, defender una idea que puede parecer ridícula. Los guerreros de la luz se permiten tales días.
No tienen miedo de llorar viejas penas, ni de alegrarse de nuevos descubrimientos. Cuando siente que llegó su momento, lo abandona todo y parte hacia su aventura tan soñada. Cuando entiende que está en el límite de su resistencia, sale del combate, sin culparse por haber hecho alguna locura inesperada.
Un guerrero de la luz no pasa sus días intentado representar el papel que otros eligieron para él.
Paulo Coelho, Manual del guerrero de la luz.
Que buen libro, me encantaría leermelo
ResponderEliminarEsta por internet para descargar... podría buscartele si te interesa.
ResponderEliminarMuchas gracias
ResponderEliminarPor cierto ¿te interesa publicar algo en el blog o te apuntanste sin más? Es que todo el mundo me abandona en Blogger.
Solo necesito saber que escribir, hasta este le tengo abandonado, solo me limito a copiar...
ResponderEliminarEs cuestion de que me inspire....
Pues nada hijo, a lo dicho. Escucha música, leé, ve alguna película y parate un rato a pensar en un lugar agradable (o no), haber si consigues inspirarte.
ResponderEliminarUna cosa: ¿Conoces una película llamada: "El imaginario del doctor parnassus"? La están echando en el cine y la fuí a ver. Te la recomiendo, una obra maestra del director Terry Giliam.
Es una peli de cine algo alternativo y por eso no tiene pinta de ser muy popular, por eso invito a todos los que puedo a ir a verla al cine y que no se la baje.